Every Country’s Sun. La esencia de 20 años de carrera de Mogwai encerrada en un frasco tan dulce como corrosivo

En Every Country’s Sun encontramos todo lo bueno, puro y esencial que hacen a Mogwai una de las bandas con las que merece la pena detenerse tantas veces como sean necesarias. Un eterno retorno en cuanto a formas, sensaciones y percepciones. En Every Country’s Sun están los Mogwai capaces de enarbolar contundentes subidones desde una deliciosa y robusta calma. Los Mogwai que tejen telas de araña desde la paz más placentera hasta las batallas más abrasivas.
Ojo y orejas a temas como «Coolverine», «Party in the Dark» (donde Stuart Braithwaite incluso canta), «aka 47«, «Don’t Believe the Fife», «Battered at a Scramble», «Old Poisons» o «Every Country’s Sun». Cortes que levantan monolitos de cemento y aluminio, empapados en giros frenéticos con sabor a lejía y napalm, ecos a Slint y aromas a Young Team. Hipnóticos, venenosos, seductores, adictivos… Mogwai excavan en su pasado y encuentran una inspiración que les brinda horizontes que se expanden infinitos.
Mogwai vuelven a morder con tanta fuerza y furia que se han convertido en uno de los principales enemigos, o aliados según se mire, de GAES y demás centros de especialistas auditivos.
Every Country’s Sun es una nueva criatura atómica que merece ser tratada con cuidado, mimo y respeto. Recuerda que este disco, como buen gremlin, lleva asociadas tres reglas de vital importancia:
- No lo expongas a la luz brillante, en especial a la luz solar, porque morirá.
- Nunca lo mojes.
- Y la regla más importante, la que nunca se debe olvidar, si lo pinchas a partir de medianoche… que sea a todo volumen.
Mogwai – Coolverine
Med Vega